domingo, 4 de marzo de 2012

La Competitividad

Según el diccionario de la Real Academia española la competitividad viene a ser:
capacidad de competir; rivalidad para la consecución de un fin”.
En mi opinión la competitividad es la capacidad de conseguir los mejores resultados con los recursos disponibles.
La competitividad representa un papel muy importante en nuestras vidas, ya que si nosotros mismos no fuésemos competentes, no seríamos capaces de superar ninguna de las metas que nos propusiésemos porque cualquier persona nos vencería y nos dejaría por los suelos. Por este motivo yo pienso que debemos ser competentes durante nuestras vidas para poder llevar a cabo nuestros sueños y poder ofrecer competencia a nuestros competidores y triunfar en nuestras vidas.
Vivimos una época de competición salvaje. Desde que nacemos se nos educa en una sociedad en la que sólo vale que seamos el mejor: el mejor de clase, al caerle bien al profesor, al sacar las mejoras notas y obtener los mejores resultados posibles; el mejor jugando en los deportes, todos hemos soñado en ser uno de los mejores jugadores de algún juego o ser muy bueno para que las chicas se fijen en ti; el mejor con los amigos, es decir querer ser la persona en la que todo el mundo confía y cuenta sus problemas, es decir sentirte querido; el mejor con las chicas,¿ quién no ha querido nunca ser capaz de ligar con cualquier chica y poder elegir la que quieras? SIMPLEMENTE QUIERES SER EL MEJOR DE LOS MEJORES.
La competitividad no está tan mal. Creo que te ayuda a mejorar, a esforzarse un poco más, a avanzar. Pero hay que entenderla bien. El objetivo de ser el mejor no consiste en tener al resto por debajo de ti. Consiste en ser TÚ el que más alto estés. Es parecido pero no tiene nada que ver.
Pensar en estar cada día más alto, no te llevará nunca a pisotear a nadie. Uno mira hacia arriba, y  con esa mirada se busca mejorarse a él mismo.  Si las demás personas mejoran no pasa nada, ya que  lo importante no es cuanta gente tienes por debajo ni cuantas personas haya por debajo. Lo importante es la altura que alcanzas y  disfrutar del vuelo mientras puedas. 

domingo, 19 de febrero de 2012

¿Qué es la felicidad?

“El concepto feliz es tan poco frecuente como efímero cuando raramente se produce. La felicidad no debe ser una meta en absoluto y si lo fuere tienen un problema” Anónimo.

Esta cita demuestra la complicación que tiene este sentimiento y lo difícil que es encontrarlo.

Existen diferentes interpretaciones del concepto felicidad, según la filosofía, según la religión, según la ciencia y según nosotros mismos.

La mayoría de las religiones manifiestan que la felicidad se alcanza en la unión con Dios.

Algunos autores del Nuevo Pensamiento consideran que la felicidad es una actitud mental que el hombre puede asumir de manera consciente, es decir, tomar una decisión, aunque ésta parezca inalcanzable.

Como todas las emociones que sentimos, la felicidad tiene una explicación fisiológica, en el resultado de una actividad neuronal, en la cual los factores internos y externos interactúan mutuamente estimulando el sistema que da respuesta a los estímulos emocionales que lo requieran.

En mi opinión la felicidad es un estado de ánimo, una sensación, una forma de ser… que se produce cuando crees haber alcanzado una meta y que te hace ver las situaciones más positivas en ese momento y nos ayudará a proponernos nuevas metas para el futuro.

El simple hecho de que Iniesta metiera el gol de la victoria en el minuto 116 y que hiciese campeona del mundo de fútbol a la selección española de fútbol por primera vez en la historia, fue un momento histórico e irrepetible para los españoles, un partido de fútbol, únicamente un partido fue capaz de poner en pie a toda España y que todos estuviésemos felices, pero el ganar el Mundial no cambió nuestras vidas, íbamos a tener que seguir yendo al instituto y nuestros padres iban a seguir pagando sus facturas simplemente fue uno de LOS PEQUEÑOS PLACERES DE LA VIDA que nos hizo felices.

Otro ejemplo más cotidiano es el acabar un examen. Cuando acabas un examen que llevas estudiándotelo 1 semana por el cual no has podido ir a una fiesta o por su culpa hayas dormido 5 horas la noche anterior es un momento de felicidad extremo en el cual no piensas en otra cosa y sólo dices “Ya está, he acabado”, y le das un abrazo a un amigo. Hasta es posible que esa misma tarde tengas que seguir estudiando para un examen que sea 2 días después.

La actitud es muy importante para nuestra felicidad, debemos ser siempre optimistas ya que el pesimismo sólo es otro factor en contra.

Por en conclusión la felicidad es eso, consiste en esos momentos en los que te lo pasas genial o disfrutas como nadie.

Ahora me gustaría acabar con algunas frases de personajes reconocidos que nos pueden hacer reflexionar sobre la felicidad:
-“La felicidad consiste principalmente en conformarse con la suerte, es querer ser lo que uno es” Erasmo de Rotterdam.
-“Felicidad no es hacer lo que uno quiere sino querer lo que uno hace” Jean Paul Sartre.
-“El dinero no da la felicidad, pero procura una sensación tan parecida que necesita un especialista muy avanzado para verificar la diferencia” Woody Allen.
-“Existen dos maneras de conseguir la felicidad, una hacerse el idiota y la otra serlo” Sigmund Freud.
-“Hijo mío, la felicidad está hecha de pequeñas cosas, un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna” Groucho Marx.
-“Si quieres, cualquier cosa puede contribuir a tu felicidad” Juan Carlos Valenzuela.

domingo, 5 de febrero de 2012

Adicciones

 En su sentido primario y tradicional una adicción, es una dependencia hacia una sustancia, actividad o relación que arrastra a la persona adicta hacia ese objeto de deseo y que normalmente le hace apartarse de todo lo demás que le rodea. La adicción afecta a sus pensamientos y provoca que el comportamiento del adicto esté dirigido únicamente hacia ese fin.

Es importante que entendamos la diferencia entre una adicción y un hábito. Un hábito está formado por una rutina, sin embargo la adicción es una “dependencia”, una obsesión, una necesidad compulsiva, es decir que lo necesitas. Esto puede producir graves consecuencias en la vida de la persona, pudiendo ser a nivel físico o mental, la adicción te debilita y en algunos casos extremistas puede resultar “destructiva”. Los hábitos más frecuentes en nuestra sociedad pueden ser ver a la gente fumando o bebiendo, pero el hábito pasa a dependencia cuando esa persona deja de fumar 1 ó 2 cigarrillos al día y se fuma un paquete o cuando en vez de un cubata se toma 5.

Lo normal cuando nos hablan sobre adicciones,  se pensaba en adicciones a sustancias (drogas, medicinas legales), al alcohol, al juego o al sexo.

Con la llegada de las nuevas tecnologías hemos empezado a oír nuevos tipos de adicciones: adicción a la pornografía, al ejercicio físico, a determinados tipos de comida, a estar bronceado etc. la lista es interminable. Estas adicciones son muy peligrosas además de a veces llegar al límite de lo estético, pueden ser altamente perjudiciales para la salud en casos extremos.

También pienso que es conveniente recordar la diferencia entre uso y abuso, los usos aceptados de ciertas sustancias se definen en el marco de la cultura, es decir aunque cueste creerlo vemos normal que los jóvenes de hoy en día consumen algunos tipos de drogas, cosa que en la época de nuestros abuelos era impensable. Por lo que observamos como se difieren de unas culturas a otras y cambian a lo largo del tiempo. Cuando una sustancia se utiliza de una forma diferente al uso aceptado dentro de una determinada cultura, se habla de abuso, en nuestra cultura occidental, ciertas sustancias como el alcohol o la cafeína  son socialmente aceptables y solo se habla de abuso y adicción cuando superan el límite de lo aceptable y vemos como las personas adictas a ellos están siendo perjudicadas.
Necesitamos ser honestos con nosotros mismos, ver en qué medida podríamos tener desde una leve dependencia de cierta sustancia u objeto, a un grave problema, que interfiera gravemente en nuestra vida laboral, en nuestras relaciones con los demás o en nuestras actividades sociales y que necesite ser tratado por un profesional experto médico y/o terapeuta, aparte del sector profesional, de una forma más personal nuestras familias, mejores amigos y conocidos pueden sernos de gran ayuda para luchar contra una adicción.

En  la actualidad hay muchos tratamientos efectivos y terapias disponibles, y gracias a estos medios que nos proporciona la sociedad podemos vencer las adicciones, superar la dependencia. No solo nos sentiremos liberados, más fuertes si no que también nos ahorrará mucho sufrimiento a nosotros y nuestras familias. 

Muchos coincidirán conmigo en que no es fácil superar una adicción, generalmente hay una montaña de cosas que nos han llevado a esa situación y no sabemos por dónde empezar, puede ayudarnos a no rendirnos antes de tiempo reflexionar en la siguiente frase de Concepción Arenal:

“Cuanto más se dividen los obstáculos son más fáciles de vencer”

lunes, 23 de enero de 2012

¿Cómo nos afecta la crisis?

La crisis de forma directa o indirecta nos está afectando a todos.
Los principales efectos de la crisis son:
- Pérdida de trabajo lo que lleva a un aumento del paro.
- Bajadas de salarios.
- Menos gasto familiar.
- Pérdida de poder adquisitivo.
- Cierres de empresas pequeñas.
- Aumento de la pobreza.
- Aumento de la delincuencia.
- Pérdida de bienestar social.
- Mayor diferencia entre clases sociales.
- Subida de impuestos.
- Subida de intereses bancarios.
- Desestabilización política.
- Aumento de fraudes.
Millones de personas en distintos lugares del mundo están siendo afectadas de manera directa por la crisis, ciertas personas no tan lejos de nosotros como algún amigo, familiar, jefe, cliente etc, están sufriendo muchas dificultades para seguir adelante o conseguir “llegar a final de mes”. También hay un sector de la población a los cuales esta situación económica no les afecta de manera tan directa, ya que pueden no haber perdido su trabajo. Aunque casi todos estamos afectados por el pesimismo, la tristeza y la inquietud que genera la crisis, que nos impide disfrutar de las muchas cosas que nos rodean.
Yo pienso que las personas que no están afectadas por la crisis y no conocen a nadie cercano perjudicado por ella, les preocupan más los problemas económicos, que los millones de parados que hay en nuestro país.
Los mensajes que diariamente recibimos a través de los medios de comunicación (radio, televisión periódico….),de personas influyentes como políticos, periodistas o economistas, que dicen que todo puede arreglarse y que están haciendo todo lo posible, pueden influirnos emocionalmente, al ver que las cosas van a peor o no mejoran. Lo normal es que esas sensaciones aumenten nuestra frustración y ansiedad, aumentando la posibilidad de crear tensiones en casa y mostrar agresividad a los demás.
Creo que sí estamos deprimidos, tenemos una visión negativa de las cosas y pensamos que todo va a salir mal, se nos quitan las ganas de buscar soluciones a los problemas. Cuando vemos como las metas de personas conocidas tampoco salen adelante, podemos sentir miedo, pero así no conseguiremos avanzar.
Ciertos grupos están siendo más afectadas por la crisis: los jóvenes que pierden toda su esperanza al ver que han acabado los estudios, se han esforzado y no son capaces de encontrar trabajo, sin poder abandonar el hogar familiar, ni acceder a préstamos bancarios etc.
Si una persona con una edad avanzada (40-60 años) pierde su trabajo, le resulta muy difícil encontrar uno nuevo con características parecidas a su trabajo anterior, además este grupo probablemente tenga préstamos que pagar a los bancos y sin trabajo les será difícil pagar las deudas aunque ellos quieran.
A nivel individual, todos podríamos hacer algunas cosas que ayudarían a cambiar esta situación negativa. A nuestra edad, todos podemos poner nuestro granito de arena para poder salir adelante. Si estudiamos y hacemos lo que nos piden nuestros mayores y dejamos de pedir cosas innecesarias, ayudaremos a nuestras familias, que se sentirán mejor al ver como intentamos ayudar.
Cambiar nuestra forma de pensar y dejar de centrarnos en “lo que nos falta”, y tener en cuenta “lo que si tenemos”, que por poco que sea siempre es algo y es mejor que nada. Lo que tenemos lo hemos logrado con nuestro esfuerzo y al igual que ya hemos conseguido nuestras metas en un pasado las podremos conseguir igual en un presente. 
Las situaciones difíciles sacan lo peor y lo mejor de nosotros mismos, sin embargo en malos momentos, muchas personas ingeniosas y creativas consiguen sus mejores resultados y obtienen grandes éxitos en sus negocios o en su vida ¿qué les hace diferentes?, tal vez la clave esté en su enfoque de las situaciones, se enfrentan a ellas de manera diferente, porque como decía Einstein “No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo”.